La trayectoria artísca de Abd Víctor Parte 6

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De ese mes de abril es una extensa entrevista con el pintor, a la que ya nos hemos referido (cf. nota 5), en la que afirma que "Lo que estoy haciendo últimamente es sobre las mujeres desnudas, pero lo que represento en mi obra somos todos desnudos en este mundo. A veces soy yo el que está en esa figura de mujer jugando con la realidad. La persona que está recibiendo los golpes todos los días es la mujer, pero yo no me refiero sólo a la mujer, sino a todos nosotros, que no podemos ni respirar, ni hacer nada; estamos metidos como en una caja y no podemos salir. En este cuadro -y señala "Batalla eterna" - hay un punto donde se la luz, el sol, la libertad, pero también viene un pájaro de hierro, que está matando a la gente; es la máquina que nos mata todos los días. Y he puesto a la personas desnudas porque alguien desnudo frente a esa máquina se hace más daño, está más indefenso. Todas esas cosas me rondaban en la cabeza desde hace tiempo y quería sacarlas de mi y hacerlas realidad". Abd señala que había cambiado algo su forma de pintar, que ahora era menos simbólica "porque alli (Siria) no puedes expresarte directamente".

Del 1 al 10 de diciembre del 83 realiza una exposición en la sala de Turismo de Santander, y en febrero del 84 en la sala Pablo Gargallo de Zaragoza. Mercedes Marina observaba cambios en la obra de Abd respecto de exposiciones anteriores. Si hasta entonces primaba el dibujo sobre el color y la figura, casi siempre humana, tenía dimensiones escultóricas, ahora ganaban los valores pictóricos. Las influencias de Picasso y el cubismo estaban ya asimiladas, hechas propias, interiorizadas y, respecto del espacio, se pareciaba frente a su descomposición en planos sucesivos una aproximación al orfirmo de Delaunay. Aunque hay figuras monumentales y la tendencia al muralismo, aparecen las figuras animales: se inaugura el monstruo como "campo abonado para su fantasía". Hay avances frente a la monocromía y más contención en el movimiento de las figuras. "Abd Víctor -afirma M. M.- conserva lo que de original había en su pintura, la antítesis entre el dinamismo de las curvas y los rotros inescrutables y fríos y la ruptura y recomposición de la figuras". Aprecia la depuración de su técnica (16).

Para Fernandez Molina, "Estructura sus cuadros en compisiciones que tienden al gran formato, al muralismo. Sus temas, cálidos e inquietantes, como un animado y templado nocturno, nos conducen a una atmósfera de leyenda oriental. Lunas, mujeres, animales, paisajes, se ordenan de forma que ofrecen como el testimonio pintado de algunos episodios de un amplio canto épico y lírico" (17).

Notas

5) Begoña Pueyo: "Abd Víctor, un pintor sirio afincado en Zaragoza", Hoja del Lunes, Zaragoza, 4-IV-1983.

16) Ibidem, 16-II-1984.

17) "Como el aroma de un vino nuevo", El Día, 18-II-1984.